Viviendas

Sabías que el aire interior está más contaminado que el exterior?

El aire interior está entre 2 y 5 veces más contaminado que el exterior, según varios estudios entre los que se encuentra el de la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA)1. A esto, además, se le suma el hecho de que formamos parte de la conocida como ‘Indoor Generation’ o ‘Generación de Interior’, es decir, pasamos el 90% de nuestro tiempo en lugares cerrados, según la Organización Mundial de la Salud (OMS)2.

Calidad del aire interior

Calidad del aire interior (CAI) es el término con el que nos referimos a la naturaleza del aire dentro de los edificios, el cual afecta a la salud y el bienestar de sus ocupantes. Esta calidad viene determinada por los niveles de contaminantes presentes en el aire. Un indicador representativo son las partículas en suspensión o material particulado (PM), que son una mezcla de partículas sólidas y líquidas de sustancias orgánicas e inorgánicas suspendidas en el aire.3

Las partículas se clasifican en función de su diámetro aerodinámico en PM10 (diámetro inferior a 10 µm), denominadas finas y gruesas; PM2.5 (inferior a 2,5 µm), denominadas partículas finas; y PM0.1 (hasta 0,1 µm), denominadas partículas ultrafinas. Son estos dos últimos grupos son los más peligrosos para la salud, ya que pueden entrar en los pulmones con más facilidad.4

Agentes contaminantes

En el interior de los edificios que más frecuentamos (viviendas, oficinas, lugares de ocio, escuelas…) podemos encontrar múltiples fuentes de contaminación tanto de elementos presentes en el interior, como otros compuestos que provienen del exterior.

Entre los contaminantes del interior del edificio encontramos:

  • Humo del tabaco.
  • Alérgenos como polen de plantas, partículas provenientes de animales o ácaros.
  • Monóxido de carbono, óxido de nitrógeno, partículas o algunos compuestos orgánicos volátiles que proceden de aparatos de calefacción y producción de agua caliente, o de la cocina.
  • Humedad que da lugar a hongos y moho
  • Compuestos orgánicos volátiles emitidos por algunos productos de construcción o limpieza, muebles, decoración, bricolaje etc.

Del exterior del edificio puede filtrarse:

  • Radón, un gas de origen natural que está presente en suelos y rocas. Al pasar al aire emite partículas radiactivas que pueden entrar en el edificio por pequeñas grietas. En altas concentraciones es peligroso para la salud.5
  • Contaminantes del aire procedentes de coches, chimeneas o procesos industriales.6

Efectos nocivos en la salud

La exposición prolongada a la polución interior puede causar problemas en nuestra salud, especialmente en los niños, como irritación de ojos, nariz o garganta, dolores de cabeza o problemas respiratorios. Por este motivo, es fundamental cuidar la calidad del aire que respiramos. Para ello, los expertos7 recomiendan ventilar de forma natural, pero también apoyarse en la tecnología.

Beneficios

  • En menos de 12 horas, neutraliza los virus, bacterias (ej. E-Coli, Salmonella), y esporas de hongos (ej. Penicillium) en un 99,99%.
  • Desodorización, elimina por completo los olores debidos a la alta concurrencia de personas, del tabaco, de las cocinas, etc.
  • Mantiene los parámetros de calidad que están en constante aumento y alarga la vida útil de los productos, de forma que se minimiza el desperdicio y se maximiza la eficiencia operativa.
  • Tecnología activa, no pasiva  que desinfecta el aire y las superficies de los locales incluyendo zonas de difícil acceso.
  • Actúa sobre las superficies.
  • Se pueden mantener los espacios desinfectados sin pulverizar productos químicos agresivos.
  • Eliminación de biocontaminantes aerosoles y compuestos orgánicos volátiles (VOC’s).
  • Respecto a otras tecnologías, no necesita utilizar filtros, no recircula y es una tecnología activa no pasiva que  no genera ozono (en modelos portatiles es posible bajo criterio del operador).
  • Su mantenimiento es mínimo y de fácil instalación.
  • No es perjudicial para las personas, por lo que no se requiere que los espacios estén desocupados ni evacuados, las salas pueden permanecer ocupadas las 24 horas del día de forma segura.
  • Consumo prácticamente insignificante (39-75 W, dependiendo del modelo de equipo).
  • Mínima inversión y valor añadido a su negocio.